Con el objetivo de mantener altos estándares de calidad, las instituciones implementan diversas herramientas para medir la satisfacción de usuarios. Esto busca impulsar la mejora continua de los espacios académicos y los procesos de aprendizaje, enfocados en la formación integral de los estudiantes y en brindar un servicio acorde a las necesidades académicas y del mercado laboral.

En este contexto, los ingenieros de sistemas han estado trabajando en el desarrollo de ecosistemas informáticos aprovechando los últimos avances tecnológicos, como la inteligencia artificial. Estos sistemas buscan facilitar los procesos organizacionales, lograr eficacia y eficiencia, generar información precisa para respaldar la toma de decisiones y plantear acciones de mejora continua. Todo esto contribuye a la competitividad y al cumplimiento de estándares cada vez más exigentes.

Aún cuando la Corporación de Estudios Tecnológicos del Norte del Valle, ha implementado diferentes estrategias para evaluar la satisfacción de los usuarios en sus espacios académicos y laboratorios, la medición no era registrada de forma continua, lo que generaba intervalos de información medianamente confiables y no permitía identificar suficientemente las oportunidades de mejora en tiempo real, afectando el desempeño de los procesos involucrados.

En respuesta a esta necesidad, desde la Dirección del procesos de Medios Educativos y Laboratorios, se ha desarrollado una herramienta denominada Merceneider. Cuyo objetivo es medir el nivel de satisfacción de estudiantes  docentes, de los espacios utilizados en la institución para actividades académicas, investigativas y de proyección social; en aras de mejorar los procesos internos, identificar oportunidades de mejora, incrementar la eficacia y la efectividad de las actividades, fortaleciendo la cultura de la calidad.

Marceneider se compone de módulos Arduino, que corresponden a microcomputadoras programables. Estos módulos permiten calificar la satisfacción de los usuarios en relación a los diferentes espacios utilizados.

El concepto de Marceneider evoca la saga de Terminator, en la que se daban órdenes a una máquina para ejecutar tareas específicas. En este contexto, aunque no contamos con un «Exterminator», si que tenemos máquinas que se pueden programa, y esta es la tarea de un programador: crear un T1000 capaz de realizar actividades o acciones requeridas según instrucciones o comandos preestablecidos.

Con la implementación de ésta tecnología desarrollada por el Semillero de Investigación «Hola Mundo», se espera que tanto docentes como estudiantes hagan uso e esta valiosa herramienta y participen activamente en la evaluación de los espacios y en la búsqueda constante de mejoras.