La palabra trading, es un término que se escucha con mayor regularidad en la actualidad y significa comercio o transacción. Este vocablo se originó en Japón a finales del siglo XVIII; aludiendo a una actividad económica en la que se negocian instrumentos financieros a corto, mediano o largo plazo, a fin de obtener beneficios o ganancias, que en términos financieros representan rentabilidad económica; por ello, requiere de un análisis financiero, técnico y macroeconómico que evalúe el riesgo a la hora de invertir, de aquí que se conozca como trading financiero.

El trading se ha popularizado con la inclusión de las nuevas tecnologías, realizando operaciones online a través de plataformas, que consisten en programas informáticos que permiten negociar en tiempo real. Para realizar estas n e g o c i a c i o n e s generalmente intervienen tres figuras: bróker, trader y vendedor. Un bróker o corredor de bolsa, es el intermediario entre el comprador y el vendedor, quien por su gestión cobra una comisión. El trader o comprador, es quien tiene el recurso para iniciar operaciones y el vendedor es quien oferta.

Actualmente, en el mercado operan diferentes tipos de trading, entre los que se encuentran:

Day trading o día de cambio: se presenta cuando el inversor inicia y cierra las operaciones el mismo día de la negociación. Representa la manera de invertir a corto plazo.

Scalping: en esta modalidad, el inversor opera en periodos muy cortos a lo largo del día, inclusive por segundos.

Swing trading o comercio oscilante: consiste en realizar operaciones que pueden durar hasta alrededor de diez días.

Trading tendencial: es aquel en el que no existe un límite de tiempo y consiste en realizar operaciones según las tendencias que se presentan en el mercado.

Trading de mediano plazo: lo conforman negociaciones que operan durante meses, las cuales pueden llegar hasta los nueve meses.

Trading de largo plazo: las operaciones presentes en este tipo de trading pueden tener una duración hasta de diez años.

Trading social: se denomina así a una nueva modalidad de inversión que se basa en conectar a una comunidad de usuarios o traders, aprovechando las ventajas de las redes sociales.

En resumen, antes de invertir es necesario decidir en qué tipo de trading se quiere operar para obtener rentabilidad y en qué mercado financiero se quiere transar (de valores, derivados, materias primas, c r i p t o m o n e d a s , hipotecarios, de seguros o Forex), ya que debido al avance de los sistemas de información y la evolución de la tecnología, esta modalidad de negociación resulta interesante, dado que en ella se realizan compras y ventas de instrumentos financieros cotizados, como resultado de un análisis consciente, ya que las ganancias o pérdidas serán responsabilidad del inversor, por ello hay que conocer muy bien el funcionamiento de esta modalidad antes de operar, con el fin de aprovechar las oportunidades del mercado al momento de iniciar.

Finalmente, cabe señalar que, si bien el trading permite obtener una rentabilidad económica, también puede resultar letal para la estabilidad financiera, por ello para creer en el mito de que se obtiene dinero fácilmente a través del trading, se debe disponer de un sustancioso capital y, además, estar dispuesto a perder grandes sumas de dinero.

Por Karol Johana Jiménez.